Un violento enfrentamiento terminó con la vida de Ramón Ismael Ortega, un hombre de 50 años, en el barrio Los Almendros, Tupungato, Mendoza. Ortega había acudido a la casa de su empleador, un hombre de 73 años, para exigir el pago de su aguinaldo, lo que desencadenó una discusión mortal.
Según fuentes policiales, el encuentro comenzó de manera tranquila, pero la tensión escaló rápidamente, influenciada por el consumo de bebidas alcohólicas. La discusión derivó en un enfrentamiento físico donde Ortega, en un arranque de furia, atacó a su jefe con un cuchillo, ocasionándole cortes en la cabeza.
Legítima defensa o homicidio: claves de la investigación
La pelea alcanzó su punto más crítico en la cocina del domicilio, donde el empleador utilizó una pistola calibre 9 mm para disparar contra Ortega, quien murió en el acto. Minutos después, el atacante llamó al 911 y confesó el crimen, asegurando que esperaría a la Policía en el lugar.
Efectivos de la Policía Científica, la Unidad de Investigaciones de Tupungato y la Fiscalía N°20 intervinieron en el caso. El acusado fue detenido y se encuentra a disposición de la Justicia, que deberá determinar si se trató de legítima defensa o si existen agravantes que puedan modificar su situación legal.
La autopsia y las pericias serán fundamentales para esclarecer los detalles de este trágico hecho, que conmociona a la comunidad de Tupungato.
