El asesinato ocurrió el domingo por la madrugada en un departamento ubicado en la calle Juan Muñoz al 3500, casi en la intersección con Boquerón, en el oeste del conurbano. La víctima fue identificada como Williams Jonnathan Quispe Quenta, un joven de nacionalidad boliviana.
Según los primeros testimonios, Williams había asistido la noche anterior a un boliche llamado Equinoxio, situado en la avenida Rivadavia al 10.900, en Liniers. Allí conoció a tres mujeres, con quienes compartió bebidas alcohólicas y posteriormente regresó a su vivienda junto a ellas y otros dos amigos.
Ya en el departamento, todos se quedaron dormidos. Horas después, uno de los acompañantes despertó y descubrió el cuerpo sin vida de Williams, quien presentaba signos de vómitos. Las mujeres ya no estaban.
Homicidio y fuga: buscan a las sospechosas
De acuerdo con los datos aportados por la policía, se presume que las tres mujeres actuaron como viudas negras, un término utilizado para describir a quienes seducen con fines delictivos. Se cree que introdujeron una sustancia en las bebidas para adormecer a las víctimas, pero Williams no resistió el efecto del veneno.
Las sospechosas habrían aprovechado que todos dormían para robar un televisor y varios celulares antes de escapar. Agentes de la comisaría 12ª, la Dirección Departamental de Investigaciones y la unidad de Inteligencia Criminal trabajan intensamente para dar con el paradero de las responsables.
La causa fue caratulada como “Homicidio”, y está siendo investigada por la fiscal Silvana Bonini, quien ordenó diversas pericias y análisis toxicológicos para confirmar si la víctima fue envenenada.
