La golpeó con un martillo, la arrastró y la amenazó de muerte
Violencia de género en el sur del Gran Buenos Aires: joven fue golpeada con un martillo, arrastrada y amenazada de muerte por su esposo.

Violencia de género extrema en el sur del Gran Buenos Aires tras una denuncia impactante. Jésica, una joven de 24 años, relató cómo su esposo, un hombre de 26 años, la agredió brutalmente en un episodio que incluyó golpes con un martillo, arrastre de pelos y amenazas de muerte. El hecho ocurrió el pasado lunes en la casa de la suegra de la víctima, ubicada en la calle O’Higgins al 2000.
“Me pegó en la frente con el martillo, después me dio golpes de puño en la cara, me caí, y me tiró la moto encima”, contó Jésica.
Se refería a una moto Rouser 160 que casi la aplasta durante el ataque. Pese a la gravedad de la situación, nadie intervino para detener la agresión, excepto una tía de la víctima.
El caso de violencia de género se agrava aún más por las circunstancias familiares. La pareja tiene una hija de 4 años en común, pero esto no detuvo al agresor, quien continuó con la brutalidad incluso después de que ella intentó levantarse del suelo. “Su hermano (de mi esposo) y su papá, en vez de parar el problema y separar, me agredieron, me insultaron y me echaron. Yo soy la mamá de su nieta, pero el machismo pudo más”, lamentó la víctima.
Amenazas de muerte y falta de protección
El episodio de violencia de género culminó con una escalofriante amenaza. Antes de que Jésica abandonara el lugar, su esposo le advirtió: “Andá a casa, que te voy a dar tres tiros”. Este detalle fue incluido en la denuncia formal presentada ante las autoridades.
El origen del conflicto, según relató la víctima, comenzó cuando ella fue a buscar a su pareja, quien había desaparecido durante cuatro días y se negaba a pagar una deuda contraída a nombre de ella. Esta discusión derivó en el brutal ataque que dejó marcas físicas y emocionales en la joven.
La causa está en manos de la UFI 17 especializada en delitos vinculados a la violencia de género y familiar de esa jurisdicción. A pesar de la gravedad de los hechos, el agresor solo fue imputado por “lesiones leves y amenazas” y permanece en libertad, lo que genera temor en Jésica, quien ahora pide una restricción perimetral para protegerse junto a su hija.