Misteriosa muerte de un cura en fiesta hot y drogas en Bélgica

Un escándalo ha sacudido a Bélgica tras la muerte de un cura británico de 69 años, identificado como Andrew W. El sacerdote falleció el jueves por la noche durante una fiesta de sexo y drogas en el presbiterio de su amigo belga, Bernard D., de 60 años, quien ahora enfrenta acusaciones de «tráfico de drogas con resultado de muerte».
Andrew W. había llegado a Bélgica para asistir a la visita del papa Francisco y se encontraba en la casa del cura belga en la parroquia de Heide. La noche de su muerte, ambos hombres consumieron éxtasis y poppers, según las investigaciones iniciales.
Entre la madrugada del viernes, Bernard D. llamó a los servicios de emergencia después de que su amigo se desmayara. A pesar de los esfuerzos de los médicos por reanimarlo, no tuvieron éxito, y avisaron a la policía.
Las autoridades han comenzado una investigación, y los resultados preliminares indican que la fiesta involucró sustancias ilegales y conductas sexuales. Este trágico suceso ha generado conmoción y controversia en la comunidad.