n la vida cotidiana, el celular es parte inseparable de nuestra rutina. Lo usamos para trabajar, comunicarnos y entretenernos. Sin embargo, la especialista en lenguaje corporal y relaciones sociales Vanessa Van Edwards asegura que este hábito puede ser muy perjudicial en ciertos contextos.
En una entrevista en el podcast The Diary of a CEO, Van Edwards fue contundente: “Cada vez que mirás tu teléfono, parecés un perdedor”.
La primera impresión se decide en segundos
Según la investigadora, los seres humanos somos capaces de detectar rasgos de personalidad con un 76% de precisión en solo unos segundos. Eso significa que los primeros gestos y posturas que mostramos influyen de forma inmediata en cómo nos ven los demás.
Por eso, mirar el celular en medio de una cita, una reunión de trabajo o una entrevista laboral puede tener un impacto directo en la impresión que generamos.
La postura de derrota
Van Edwards definió ese gesto como la “postura universal de derrota”: hombros hacia adelante, cuello bajo y mirada dirigida al suelo.
Este lenguaje corporal, explicó, es idéntico al de un atleta que acaba de perder una competencia. “No solo parecés distraído, también transmitís debilidad y derrota”, advirtió.
La especialista subrayó que la postura corporal habla incluso más que las palabras, y que las personas suelen confiar en lo que ven antes que en lo que escuchan.

Errores frecuentes y cómo evitarlos
Uno de los errores más comunes, según Van Edwards, es sacar el celular en medio de situaciones clave:
- Durante una entrevista laboral. Da la impresión de desinterés y falta de profesionalismo.
- En una cita. Puede interpretarse como aburrimiento o desprecio hacia la otra persona.
- En una reunión. Sugiere desconexión y falta de compromiso.
Su recomendación es simple: en momentos importantes, el teléfono debe guardarse.
No es contra la tecnología, es a favor de la imagen
Van Edwards aclara que su mensaje no busca “demonizar” al celular, sino ayudar a entender cómo los pequeños hábitos moldean la forma en que otros nos perciben.
En palabras de la experta: “Una mala primera impresión es muy difícil de cambiar. Pero si lo hacés bien desde el principio, podés asegurar una relación exitosa durante años”.
El consejo es claro: si querés transmitir seguridad y causar una buena impresión, evitá mirar el celular en público en momentos clave. La postura corporal que adoptás al hacerlo puede decir más de vos de lo que imaginás.
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